Este morenazo sanbernardino jamás que un casting lo llevaría a cumplir sus metas artísticas. Ahora gracias a su talento, facha y simpatía puede fácilmente convertirse en el nuevo galán de la serie.

Como cualquier noche de jueves, Pablo Rodríguez (18) veía las corridas faranduleras de Vértigo cuando aparecieron los chicos de Amango anunciando la realización de un casting para su segunda temporada. "Siempre me gustaron porque hacen lo que me fascina que es cantar, bailar y actuar", cuenta.
Contrario a sus convicciones que otorgaban poca credibilidad de estos procesos de selección, este morenazo sanbernardino decidió emprender el desafío. Se levantó a las cinco de la mañana, audicionó a las 11:30 y ...¡quedó!.
Hoy Pablo es uno de los nuevos protagonistas de este fenómeno interpretando nada menos que al díscolo Miguel Márquez, el guapo mellizo de Romina que revolucionará la Academia con su talento y coquetería. "Mi personaje va a aportar mucha buena onda, alegría y compañerismo", explica.

Mucha gente no cree en estos procesos de casting...
-Yo tampoco! Cuando fui y me dijeron "Te llamamos", quedé como ¡cuek!, perdiendo las ilusiones. Pero lo hicieron! Pasé por varias pruebas de canto, baile y actuación y, después de un largo proceso, me dijeron "Tu eres nuestro hombre" y quedé en shock una semana.

¿En shock?
-Sí, cuando supe que iba a formar parte de este sueño, me tiré al piso y todos los que estaban conmigo s tiraron también haciendo un "montoncito". Quedé todo moreteado, pero no me importó. Nunca antes un sueño se me había hecho realidad. Fue una emoción increíble y sentí que había logrado algo muy importante que marcaría mi vida.

¿Cuál es el aporte de tu personaje?
-Miguel es un joven bailarín de talento innato que, a diferencia de los que ensayan todo el día para llegar a la perfección, simplemente se lanza y logra un nivel increíble, lo que despierta clara envidia por parte de su hermana melliza.

También se dice que es medio jote ...
-Bueno, es un joven muy "canchero" y siempre es el centro de atención, pero aunque él sabe que tiene un gran talento, no pasa por encima de los otros compañeros. Creo que va a aportar con mucha buena onda, alegría y compañerismo.

¿Cómo crees que te va a recibir el público?
-Espero que bien. Sé que algo muy importante para un personaje público es el apoyo de la gente. Hay personas que han estado a punto de terminar su carrera, pero que se han quedado simplemente por el hecho de ser querido, que debe ser increíble. Yo espero algún día recibir aunque sea un poco de ese cariño.

¿Qué pasa si te agarran bronca?
-Cada vez que salga me pondré una bolsa en la cabeza para que no me agarren a palos (risas) ... Hablando en serio, quizás haya gente que le tome mala, pero ojalá eso sea con Miguel, no conmigo, porque la verdad es que somo bien distintos. De todas formas siempre voy a estar dando lo mejor de mí.

¿Impaciente?
-¡Demasiado! Estoy muy ansioso de poner en práctica lo que me encata hacer y siempre dar lo mejor de mí. Aunque sea una palabra la que tenga que decir, un paso el que tenga que bailar o una estrofa la que deba cantar, siempre estaré entregando mi cien por ciento.